El club de F.L. "Amigas y Conocidas" de la Biblioteca, visitó el pasado 22 de junio la ciudad de Toledo como actividad cultural y como despedida a las sesiones de lectura hasta después del verano.
Un grupo formado por 24 lectoras nos embarcamos a conocer de primera mano el encanto histórico y cultural de esta bella ciudad.
LLegamos con las pilas puestas y con la confianza de que el lugar no nos iba a dejar indiferente.
Ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Conocida como ciudad de las tres culturas.
Un pequeño recorrido en autobús, nos permitió disfrutar de una espectacular vista durante todo el recorrido.
El Puente de Alcántara, puente que data de la época romana aunque se tiene constancia desde el periodo árabe : de hecho "alcántara" en árabe significa "puente". Este puente da entrada al casco histórico de Toledo y a su recinto amurallado.
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Una panorámica desde el Mirador del Valle, lugar obligado para todos los visitantes y donde el río Tajo se une para formar una de las imágenes más contemplativas de la ciudad.
Con ese buen sabor de boca arrancamos a pie nuestra programada visita guiada.
Llegamos a la Plaza de Zocodover o "mercado de las bestias" uno de los principales puntos de encuentro de la ciudad. Ubicada en el kilómetro cero del casco antiguo porque de allí parten todas las calles de la ciudad. Allí se celebraban fiestas, corridas de toros, juegos e incluso autos de fe y la ejecución pública de reos en la época de la inquisición. Una plaza varias veces reformada, sobre todo el ensanche, en la época de los Reyes Católicos.
Seguimos nuestra ruta por las calles típicas del casco antiguo.
Pudimos pasear por toda la judería con estrechas callejuelas, sinagogas, iglesias , comercios, casas nobles y demás arquitectura donde la historia marcaba una interesante urbe de la riqueza de Toledo. Todo perfectamente señalado con los símbolos expuestos a lo largo del suelo y en algunos monumentos emblemáticos.
Un recorrido por las tres culturas de Toledo que han hecho de esta ciudad una ciudad única. Nos paramos en esta ocasión en la plaza de San Román. Un lugar tranquilo, monumental, donde confluye, cultura, escritura, arquitectura y religión ya que en esta plaza se encuentran los siguiente monumentos:
-Iglesia de San Pedro Mártir
-Espalda de la Iglesia de San Ildelfonso
-La estatua del genial escritor Garcilaso de la Vega
-Museo de los concilios y la cultura histórica
-Casa donde residió Santa Teresa de Jesús
-Convento de San Clemente (Donde se cree se originó en mazapán)
Después de dejar atrás el barrio judío, llegamos a la plaza de la Virgen de Gracia donde se puede observar la Iglesia de San Juan de los Reyes y los cigarrales verdes.
Regresamos a la plaza de Zocodover dejando atrás monumentos y motivos florales que adornaron la procesión del Corpus el día anterior.
Se iba terminando la visita guiada y sorprendentemente llegamos a la calle donde al fondo se apreciaba la Catedral de Toledo.
Hicimos un alto en el camino para almonzar en un lugar tranquilo muy cerca de la plaza de Zocodover y coger fuerzas para reanudar el paseo por la tarde.
Seguimos la ruta y un pequeño grupo nos dispusimos a visitar la Catedral. Una fachada con tres portadas, puerta del Perdón en el centro, puerta del Juicio Final a la derecha y puerta del infierno a la izquierda.
Entramos al interior acompañadas de un audio-guía que explicaba cada uno de los habitáculos y joyas arquitectónica que allí se encontraban:
Capilla mayor, capilla del sepulcro, retablo de la capilla mayor, sepulcro del Cardenal Mendoza, capilla mozárabe, capilla de los Reyes nuevos, capilla del muro sur, capilla de la Epifanía, capilla de la Concepción,capilla de San Eugenío, capilla de Santa Lucía, capilla de los Reyer viejos, capilla de Santa Ana.............una magestuosa Catedral.
Un amplio templo con planta de salón de cinco naves y fuertes influencias francesas pero con cierta influencia en su horizontalidad propia de la tradición española.
Por él nos paseamos quedándonos impresionadas del encanto y la riqueza que encierra el monumento.
Una vez nos despedimos de la Catedral recorrimos varias calles para comprar algún recuerdo o producto típico del lugar.
Muy poco tiempo para conocer toda la grandeza de Toledo. Indudablemente sabíamos de sobra que teníamos que volver.
Una vez nos despedimos de la Catedral recorrimos varias calles para comprar algún recuerdo o producto típico del lugar.